lunes, septiembre 10, 2007

2007-Sunshine

Película de ciencia ficción cuya única originalidad radica en la misión llevada a cabo por los protagonistas.
En un futuro próximo el sol se está apagando y esta circunstancia pone en peligro la subsistencia de la humanidad. La misión del Icarus II será llevar una nave-bomba que consiga reactivar la estrella. En pocas palabras, un suicidio colectivo en plan high-tech.
En su aproximación al sol descubren que la nave Icarus I, que fracasó en la anterior misión de idénticas características, se encuentra suspendida en el espacio y a la deriva. A partir de ahí la película da un giro y se convierte en un thriller espacial un tanto extraño y que profundiza más en el aspecto humano y de la situación límite que no en el despliegue de medios técnicos que constituye la primera mitad del film.
Danny Boyle y Alex Garland siguen con su rollete apocalíptico y saben crear una tensa y asfixiante atmósfera. Boyle también repite protagonista con el tipo escalofriante y de cara repelente llamado Cillian Murphy, al que ya utilizó para su “28 días después”. Aquí es el físico y héroe de la misión.

De todas formas me pongo a pensar un poco y no acabo de entender muy bien por qué es necesario enviar una nave tripulada hacia el sol si a fin de cuentas se trata de enviar un gran petardo ¿no?. Me parece obvio y también absurdo. Quizás se me ha pasado algo por alto. Qué pasa ¿se desvía el cohete si va solo? Y eso que tienen un pedazo de ordenador a lo Hal 9000 que lo mismo te fríe un huevo que te calcula la trayectoria para ir a Marte. Igual es que como es tan pequeño el Sol y no se ve bien tienen miedo de fallar y por eso necesitan control manual. Por otro lado tampoco entiendo por qué tiene siempre que salir la tripulación a reparar el casco de la nave. ¿Acaso no tienen robots o brazos-robot en el futuro? Si los tenemos ahora ¿no los van a mejorar en el futuro? Porque uno cuando ve salir al astronauta ya piensa…a este se lo funden rápido! Y efectivamente, se lo funden. Falta originalidad. Si yo fuera el guionista, el astronauta terminaría su paseo espacial después de hacerse el héroe, pero ya confiado y entrando en la nave se pillaría los huevos al intentar cerrar la escotilla y moriría por fractura de escroto, congelación genital y asfixia. Eso sí sería original!!! Tome nota señor Garland para cuando acabe de escribir el guión de "Halo".
En fin, que bien hecha está y que se agradece el esfuerzo del director y del guionista lumbreras pero no tiene ni pies ni cabeza ni aporta nada nuevo al género. Try again Mr. Boyle!

Web oficial: http://www.sunshinethemovie.co.uk/

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola señor Roybatty. Al ver esta cinta me surgieron las mismas dudas que a tí respecto a las incongruencias de un futuro tecnologicamente muy avanzado pero totalmente dependiente de la mano humana.
Se te olvida la inquietud que genera que se haya enviado en una primera misión a una tripulación con un loco sicópata con un perfil de Bin Laden Cristiano.

En cuanto a la peli , pienso como tú, que se agradece el ambiente cósmico creado .
Me recuerda a una peli que ví hace un tiempo en la que el protagonista viaja en una especie de garden espacial repleto de cientíeficos . En ese viaje les ordenan destruir las que se suponen son las últimas plantas de la civilización terrícola. En ese momento aparece el héroe de turno y huye con una de esas arcas de Noé vegetariano a la parte oculta de la luna.

¿ sabes que peli era? me gustaría verla d nuevo.

Saluten.

roybatty dijo...

Hombreeeee! Todo un clásico de la ci-fi apocalíptica de los 70. Te refieres a "Naves silenciosas" (Silent Running, 1972). Una de las pocas películas de Douglas Trumbull, el artífice de las naves de 2001. Con Bruce Dern de protagonista.

roybatty dijo...

Vaya, me acaba de venir un flash que acabo de confirmar gracias a San Google (como no). Esta película se tituló originalmente "Naves MISTERIOSAS" pero en algunos pases televisivos se rebautizó como "Naves silenciosas", título un poco más acorde con el original. En TV3 también se ha emitido varias veces como "Naus silencioses".