Inaugurando el primer post musical del año debo comentar el gran concierto al que asistí el pasado viernes. Nunca me ha gustado especialmente la banda británica Depeche Mode pero la verdad que verlos en directo merece la pena por el espectáculo.
Hay que tener en cuenta que DM tocó viernes y sábado con 18.000 espectadores en el Palau Sant Jordi cada día. Comenzaron rompiendo el silencio con algunos temas nuevos “A Pain That I'm Used To”, “John the revelator” o “Precious” y alguno más de su Playing the Angel. A medida que avanzaba el concierto Dave Gahan no paraba de quitarse ropa y menear el culo como un poseso. Luego comenzó el delirio con sus clásicos “Enjoy the silence”, “A question of time”, “Policy of truth”, “Personal Jesus”. Luego algunos temas super
palizas interpretados por Martin Gore, ahí fue un bajón impresionante excepto por “Home”. El tercero en discordia, Andrew Fletcher estaba al fondo con sus teclados y a lo sumo movía las cejas. También llevaban su habitual batería y otro teclista. Luego más clásicos como “Just Can’t Get Enough”, hasta llegar a su mejor canción “Never let me down again”, todo un himno de la banda. Es curioso pero pasaron totalmente de su anterior disco Exciter, creo que solo tocaron la última, una balada que cerró el concierto. Brutal el montaje con pantallas tras el escenario mostrando un montaje videoclipero en tiempo real. Toda una demostración de cómo se hace un concierto, calidad en todos los sentidos y se nota la mano de Anton Corbijn. Recomiendo ver el DVD del Exciter Tour, One Night in Paris para aquellos que quieran aproximarse a un concierto de estas características sin salir de casa. A pesar de los fanáticos defensores a ultranza del mítico concierto de 1988 en el Pasadena Rose Bowl, Depeche Mode 101, creo que el One Night in Paris lo supera ampliamente en cuanto a calidad sonora y montaje. En fin, buen concierto de este grupo inclasificable, mezcla de pop-rock electrónico.
Hay que tener en cuenta que DM tocó viernes y sábado con 18.000 espectadores en el Palau Sant Jordi cada día. Comenzaron rompiendo el silencio con algunos temas nuevos “A Pain That I'm Used To”, “John the revelator” o “Precious” y alguno más de su Playing the Angel. A medida que avanzaba el concierto Dave Gahan no paraba de quitarse ropa y menear el culo como un poseso. Luego comenzó el delirio con sus clásicos “Enjoy the silence”, “A question of time”, “Policy of truth”, “Personal Jesus”. Luego algunos temas super
palizas interpretados por Martin Gore, ahí fue un bajón impresionante excepto por “Home”. El tercero en discordia, Andrew Fletcher estaba al fondo con sus teclados y a lo sumo movía las cejas. También llevaban su habitual batería y otro teclista. Luego más clásicos como “Just Can’t Get Enough”, hasta llegar a su mejor canción “Never let me down again”, todo un himno de la banda. Es curioso pero pasaron totalmente de su anterior disco Exciter, creo que solo tocaron la última, una balada que cerró el concierto. Brutal el montaje con pantallas tras el escenario mostrando un montaje videoclipero en tiempo real. Toda una demostración de cómo se hace un concierto, calidad en todos los sentidos y se nota la mano de Anton Corbijn. Recomiendo ver el DVD del Exciter Tour, One Night in Paris para aquellos que quieran aproximarse a un concierto de estas características sin salir de casa. A pesar de los fanáticos defensores a ultranza del mítico concierto de 1988 en el Pasadena Rose Bowl, Depeche Mode 101, creo que el One Night in Paris lo supera ampliamente en cuanto a calidad sonora y montaje. En fin, buen concierto de este grupo inclasificable, mezcla de pop-rock electrónico.
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